Una obra esencial para músicos interesados en la música tradicional de Venezuela.

El Libro Real – Su historia

Libro Real

Este proyecto comenzó en enero de 2001 con una investigación emprendida por el músico Mark P. Brown, que lo llevó a recorrer gran parte de Venezuela en busca de compositores y sus obras. Todo empezó en los años noventa, cuando Brown se interesó por la ejecución de la música tradicional venezolana, pero descubrió que había muy poco material escrito y que era difícil de conseguir. Esto lo llevó a transcribir algunas piezas del repertorio tradicional, primero para uso personal y, luego, en 2001, con la visión de crear una publicación inspirada en recopilaciones similares de otros países que se habían convertido en referencia esencial para músicos interesados en esas tradiciones.

Allí es precisamente donde El Libro Real marca la diferencia: si bien se trata de una colección de partituras transcritas, también representa un amplio esfuerzo de investigación realizado en colaboración con muchos de los compositores cuyas obras están incluidas. El objetivo fue asegurar una transcripción precisa de cada pieza, fiel a las composiciones originales, y dejar un registro lo más auténtico posible del repertorio musical tradicional venezolano.

Gracias a que las partituras del libro incluyen armonía, melodía y letra, las piezas pueden ser interpretadas en una gran variedad de instrumentos, e incluso cantadas. “Dado que la enseñanza de la música venezolana ha sido tradicionalmente oral, ha sido bastante difícil transmitirla y compartirla con quienes están interesados”, afirma Mark. “Con este trabajo espero ofrecer a profesores y estudiantes una herramienta práctica que puedan usar para enseñar y aprender la lectura musical a través de piezas de nuestro folklore”.

Two colorful books titled 'Get Your Real' on grass.
Two colorful notebooks titled 'El Libro Real' on a wooden surface.

Este resultado, que se materializa con la publicación de El Libro Real, ha sido posible gracias a la dedicación, entusiasmo y persistencia del autor, y, en el año 2017, con el apoyo de un pequeño equipo de trabajo que, bajo su dirección, contribuyó a revisar y perfeccionar el trabajo y los detalles editoriales. El resultado es una obra de gran valor cultural y pedagógico para músicos, académicos y amantes del folklore venezolano.

De los encuentros de Mark con los autores han surgido no solo valiosas anécdotas, sino también una colección de más de 550 partituras de mas de 220 compositores—un archivo importante de la música tradicional venezolana.

El propósito principal de El Libro Real es preservar la riqueza y diversidad de la música tradicional venezolana. Es una herramienta práctica y un recurso de aprendizaje, para que estas piezas puedan ser leídas, estudiadas e interpretadas por nuevas generaciones de músicos, y para rendir homenaje al valioso trabajo de los compositores que han contribuido a forjar una parte esencial del patrimonio cultural del país.
La segunda edición de El Libro Real de la Música Tradicional Venezolana (2025) consta de dos volúmenes de 500 páginas cada uno. En total, incluyen más de 570 piezas musicales. El Volumen 1 abarca obras ordenadas alfabéticamente de la A a la J, y el Volumen 2 continúa desde la L hasta la Z.
Cada partitura incluye el título de la pieza, el género musical al que pertenece y el número de página. La estructura de cada obra está señalada con letras dentro de círculos —por ejemplo, Parte A, Parte B, etc.— para facilitar su comprensión.
Cada partitura incluye el nombre del compositor, junto con sus fechas de nacimiento y defunción, y su lugar de origen.
Todas las partituras tienen una o dos páginas, de modo que el intérprete nunca necesita voltear la página mientras toca. Para la comodidad de los cantantes, las letras han sido añadidas en páginas que quedaron en blanco.
Cada partitura incluye la melodía con la letra escrita debajo de cada nota, y la armonía representada con símbolos de acordes. Cuando el espacio lo permitió, se incluyó la letra completa al final de la página o en la página opuesta.
Cuando se pudo obtener la fecha de composición, se colocó junto al título.